Acreedores le pidieron a la jueza Preska que ratifique el fallo que obliga al país a entregar acciones de YPF
Es el beneficiario de una sentencia por US$95 millones por el default de 2001 y al que la jueza norteamericana le concedió el derecho a cobrar con papeles de la petrolera.
El fondo Bainbridge, acreedor con sentencia por el default de 2001, reclamó ante la jueza Loretta Preska, que no se suspenda la orden judicial para que el país entregue acciones de YPF como parte de pago de una deuda por US$95 millones.
Se trata de la primera respuesta de los acreedores, beneficiarios de los fallos de Preska de la semana pasada, al reclamo que hizo la Argentina ante la magistrada para suspender la entrega de acciones hasta tanto apela a los tribunales superiores.
Bainbridge logró el lunes 30 que la jueza estadounidense fallara en su favor y le ordenara a la Argentina pagarle con acciones de YPF la condena por US$95 millones que obtuvo el fondo de inversión, que inició el juicio en 2016 por la deuda en default de principios de siglo.
Ese fallo fue el segundo en el que Preska le ordenó al país a entregar acciones de la petrolera para cumplir con condenas impagas. Horas antes, la magistrada dio esa instrucción para el juicio por la expropiación de YPF en favor de los fondos Burford y Eton Park por US$16.000 millones.
En su presentación ante el tribunal del Distrito Sur de Nueva York de este lunes, los abogados de Bainbridge enfatizaron que la magistrada “no debe conceder una suspensión del reciente fallo YPF a menos que Argentina transfiera sus acciones”, indicó Sebastian Maril, analista de Latam Advisors, quien sigue al detalle los juicios internacionales contra el país.
El especialista indicó que se espera “en breve” una respuesta al reclamo argentino para suspender la entrega de acciones. En ese sentido, se prevé que Burford y Eton, acreedores con sentencia en el caso YPF, argumenten ante Preska por separado.
Los cuatro argumentos que presentó el Gobierno ante la Justicia de EE.UU. por YPF
Hace una semana, la justicia de Estados Unidos le ordenó a la Argentina entregar el 51% de las acciones de YPF a los beneficiarios del fallo por la expropiación. Tras la decisión judicial, el Gobierno presentó un escrito para frenar la transferencia de los papeles de la petrolera estatal.
La defensa argentina argumentó que la jueza Loretta Preska se “excedió en su jurisdicción” y que no “hay posibilidad material de expropiar las acciones”.
A continuación, los cuatro argumentos que presentó el Gobierno ante el Tribunal Federal de Primera Instancia del Distrito Sur de Nueva York:
- El Gobierno subrayó que el país tiene “altas probabilidades de éxito” en la apelación.
- Los representantes del país advirtieron que la Argentina “sufrirá un perjuicio irreparable" si la justicia de Estados Unidos no le concede la suspensión.
- Los demandantes (Burford Capital y Eton Park) "no sufrirán perjuicio" por la suspensión del fallo, porque mantendría el status quo mientras se resuelve la apelación ante el Segundo Circuito. Remarcaron que el Estado argentino no tiene intención ni facultad de vender las acciones de YPF.
- El Gobierno afirmó que el interés público apoya la suspensión, dada “la gravedad y excepcionalidad" de este caso.
Los detalles del juicio por YPF
El 15 de septiembre de 2023, la jueza Preska condenó a la Argentina a pagar US$16.000 millones por la expropiación de YPF realizada en 2012. El fallo benefició a los representantes de las empresas que eran accionistas minoritarias de la petrolera al momento de la estatización.
El reclamo se basa en que el gobierno de Cristina Kirchner no cumplió con el estatuto de YPF porque nacionalizó la participación de Repsol en la compañía (y finalmente le pagó con bonos) pero no ofreció una operación similar al resto de los accionistas.
Desde el momento del fallo, la Argentina apeló la sentencia. Por la demora del país en pagar o intentar algún tipo de acuerdo, los demandantes multiplicaron sus estrategias de presión. Entre ellas, iniciaron el pedido de entrega de las acciones de YPF en manos del Estado, que Preska habilitó el 30 de junio.